Gucci ha regresado a sus raíces con la presentación de su colección Crucero 2026 en el histórico Palazzo Settimanni de Florencia. Este emblemático edificio, adquirido por la casa en 1953, alberga actualmente el archivo de Gucci y fue el escenario perfecto para una colección que celebra la herencia y la renovación de la marca.
La colección Crucero 2026 hace referencia a distintas épocas de la historia de Gucci. Se destacan tejidos opulentos como brocados, jacquards, terciopelos y encajes, que rinden homenaje a la tradición textil de Florencia. Las siluetas combinan elementos de maximalismo y minimalismo, creando un equilibrio entre lo extravagante y lo refinado.
Entre los accesorios, sobresale el debut del bolso Gucci Giglio, nombrado en honor al lirio, símbolo de Florencia. Este bolso, disponible para su compra inmediatamente después del desfile, representa la unión entre la tradición y la innovación. Además, se presentó la línea de alta joyería Monili, creada en colaboración con Pomellato, que combina la artesanía en cuero de Gucci con el diseño icónico de Pomellato, culminando en piezas engastadas con diamantes y centradas en una turmalina verde de casi 20 quilates.
El desfile culminó con las modelos saliendo del salón íntimo hacia la plaza, integrándose nuevamente con las calles de Florencia. Este gesto simboliza la visión de Gucci de que su archivo no es una pieza de museo, sino un participante activo en el ritmo cultural de la ciudad.
La colección Crucero 2026 de Gucci no solo marca un regreso físico a Florencia, sino también un renacimiento creativo que honra el legado de la marca mientras se proyecta hacia el futuro.